¿Qué necesitas implementar primero, la función de auditoría interna o un sistema de gestión de riesgo y control (SGRC)?
La respuesta a esta pregunta depende de la madurez y las necesidades específicas de la empresa. Sin embargo, en general, se recomienda implementar primero un SGRC antes de la función de auditoría interna.
Porque implementar primer un SGRC:
- Establece la base para la auditoría interna: Un SGRC bien definido proporciona un marco para identificar, evaluar y controlar los riesgos. Esto facilita el trabajo de la auditoría interna, ya que le da un punto de partida claro para sus evaluaciones.
- Ayuda a la empresa a alcanzar sus objetivos: Un SGRC eficaz puede ayudar a la empresa a mejorar su eficiencia, productividad y rentabilidad. También puede ayudar a prevenir pérdidas y proteger la reputación de la empresa.
- Demuestra el compromiso de la empresa con el buen gobierno: Un SGRC sólido es una señal para los stakeholders de que la empresa se toma en serio la gestión de riesgos y el buen gobierno.
Beneficios de tener una función de auditoría interna:
- Proporciona una evaluación independiente de la gestión de riesgos: La auditoría interna puede identificar áreas de mejora en el SGRC y recomendar medidas correctivas.
- Ayuda a la empresa a cumplir con las normas y regulaciones: La auditoría interna puede verificar que la empresa cumple con las leyes y regulaciones aplicables.
- Aporta un valor añadido a la empresa: La auditoría interna puede ayudar a la empresa a mejorar su eficiencia, productividad y rentabilidad.
En resumen, si la empresa no tiene un SGRC, es recomendable implementarlo primero, una vez que el SGRC esté en funcionamiento, la empresa puede considerar la posibilidad de implementar una función de auditoría interna. Finalmente ten en cuenta, que ambas funciones son importantes para el buen gobierno de la empresa.
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